La sociedad pública Aragón Plataforma Logística (APL) ha sido la referencia de la Confederación Española de Transporte y Mercancías en la celebración de la jornada “Multimodal Eurosur, desafíos actuales de la multimodalidad”, celebrado durante todo día en la sede madrileña de la Universidad Camilo José Cela, y que ha reunido a los principales agentes europeos del sector. Decenas de operadores transitarios, responsables de terminales, de empresas, líneas ferroviarias y áreas de todo el continente y diversas asociaciones de profesionales del sector han acudido a la cita que han usado como ejemplo el éxito de Plaza en sus varios de sus discursos.
En una intensa jornada en la que se han debatido los principales desafíos de un sector cambiante y sometido a la coyuntura internacional y también normativa, APL ha expuesto su experiencia y sus nuevas líneas de trabajo que la mantienen como un actor fundamental en el tránsito de mercancías del sur de Europa. Javier Álvarez, director de Intermodalidad de la sociedad pública, ha destacado los proyectos que –en este sentido- el Gobierno de Aragón tiene para la red de plataformas públicas, sobre todo en el enfoque ferroviario del transporte. Respecto a los planes de APL, Álvarez ha expuesto que se ha terminado la primera fase de “la plataforma de Teruel –que ha supuesto una inversión de 16 millones de euros- permitirá la unión con el Mediterráneo”, destacando también la autopista Zaragoza –Algeciras que convertirá a la capital aragonesa en un nodo esencial del transporte europeo y su conexión con África. “Aragón es un hub logístico con un gran futuro por delante”, ha animado Álvarez.
En este sentido, el director de servicios logísticos de Adif, Luis Vicente Moreno, ha anunciado que en mayo de 2027 estará completada la autovía Zaragoza – Algeciras, cuyo primer tramo será el Zaragoza-Madrid. Por su parte, la secretaria general de Transporte terrestre del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, Rocío Báguena, quien ha inaugurado la jornada, ha calificado esta autopista como “esencial” en el desarrollo ferroviario, y a la multimodalidad, como “una exigencia” de la competitividad de un sector que, en España, ocupa a 218.000 empresas y un millón de trabajadores y representa el 2,7% del PIB nacional, lo que hace “que no se pueda quedar al margen de la reconversión sostenible”, el otro reto de la logística europea.